Envases de cerveza: elige la botella adecuada para tu cerveza - Parte I

07 febrero, 2019

Después de elaborar tu mejor cerveza, es hora de pensar en el envase que hará llegar tu creación a los consumidores. El envase de la cerveza es la representación tridimensional del carácter distintivo de tu marca. Para un consumidor final, la cerveza y su envase son inseparables. El packaging es la cerveza y la cerveza es el packaging. 

A medida que se trabaja para pasar de un mero proyecto de experiencia de consumo a una experiencia de cerveza envasada real, disponer de una estrategia fuerte para el envasado de dicha cerveza se convierte en una necesidad. Antes de desarrollar un nuevo diseño de packaging, tómate un minuto para considerar cómo funcionarán en un conjunto la forma, la capacidad, el tamaño, el color y el cierre de la botella para garantizar que tu cerveza tenga una  presencia fuerte en las estanterías.

¿QUÉ COMUNICA EL TAMAÑO?

Aparte de los tamaños estándar más populares (330 ml / 250 ml en Europa y 12 oz en los EE.UU.), hay otras opciones que te gustaría tener en cuenta en función de la tendencia que estés tratando de seguir: 

Para compartir: 22 oz / 750 ml

La botella de 22 onzas (650 ml), o el llamado bombardero, es un tamaño de envase innovador y estratégico. Esta botella de tamaño para compartir es una de las favoritas de los maestros cerveceros para la distribución de productos especiales o de tiradas limitadas. Las 22 onzas son una alternativa contemporánea a esa botella de vino que planeas llevar a la próxima cena entre amigos.

La botella de 750 ml ofrece muchas de las comodidades del bombardero de 22 onzas, pero en un volumen que se parece más al de las botellas de bebidas espirituosas. Este formato es un verdadero tamaño para compartir y promover la amistad y la camaradería. Además de estos populares tamaños para compartir, están apareciendo tendencias que impulsan nuevas opciones de capacidad.

Tendencia de un tamaño más pequeño: 7 oz / 250 ml

¿A quién le gusta beber su cerveza caliente? La botella de formato más pequeño desafía las altas temperaturas de los días calurosos de verano. El pequeño tamaño de esta botella mantiene fría la cerveza y contenta a la gente que le gusta pasar el día en la playa. Es un tamaño perfecto para ofrecer muestras de prueba o para una configuración de variedades que permite ofrecer una tabla de degustación de cervezas pre envasada. Alternativamente, se puede utilizar para cervezas con alto contenido de alcohol por volumen (ABV), reduciendo así este nivel de alcohol.

¿Y qué pasa con el tamaño de 16 oz / 500 ml?

Si bien es un tamaño estándar bastante popular en Europa, las 16 onzas es más bien una tendencia emergente de capacidad en los Estados Unidos. Se trata más bien de un formato masculino que ofrece unas mayores dimensiones físicas en la mano del consumidor para un agarre semipersonalizado. Una verdadera pinta con tamaño customizado.

El tamaño de un botellín de cerveza comunica mucho más de lo que te imaginas. Estos tamaños de botella emergentes y para compartir están transformando los estándares de los envases de cerveza y cambiando la forma en que servimos, bebemos y nos socializamos. 

Aunque es evidente que el tamaño sí importa, la forma es otro aspecto importante a tener en cuenta a la hora de envasar tu mejor cerveza.

LA FORMA: EL APRETÓN DE MANOS DE TU CERVEZA

¿Cómo definirías el espacio físico que ocupará tu botella en la estantería y en las manos de los consumidores? La forma de la botella es el apretón de manos de tu cerveza y la esencia de la identidad de tu marca.

Piensa en tu cerveza y en tu marca cervecera como si fuera una persona. Ahora describe a esa persona. ¿Es una persona amistosa, formal o seductora? ¿Es el tío extravagante, la chica de al lado o el amigote de la barbacoa? Su forma ayuda a definir el carácter de tu cerveza.

Cuello largo

Piensa en el estereotipo de la silueta de una botella de cerveza. La primera forma que te viene a la mente es una botella de cerveza de cuello largo. El diseño de esta botella tiene unas dimensiones clave adoptadas por cerveceros grandes y pequeños. Además de su icónico y largo cuello, esta botella tiene unos hombros redondos familiares y un panel para la etiqueta con una hendidura pronunciada. Esto protege a la etiqueta de las rozaduras y ofrece una gran flexibilidad en las opciones de etiquetado y estampado.

El formato de cuello largo transmite un fuerte y moderno diseño de a pie, escogido por una amplia variedad de marcas. Sin duda se trata de una forma de botella de cerveza amistosa y familiar. Aunque la forma de cuello largo es una apuesta segura, otras formas pueden aumentar el valor y el reconocimiento de tu marca.

Bélga

La forma histórica y masculina de la botella de cerveza belga, transmite su tradicional herencia y es un punto de referencia en el viejo mundo de la cerveza, y a su vez altera las expectativas visuales que se forman alrededor de las formas de botellas. El doble hombro ayuda a evitar que los sólidos de la levadura se transfieran al vaso cuando se vierte y enturbien la cerveza. Esto lo convierte en una opción popular para las cervezas de trigo o de estilo belga. Las cervezas Stouts, Porters y otras cervezas oscuras también combinan muy bien con esta botella.

Una versión más moderna de esta botella, que procede de un pasado lejano, presenta una hendidura escalonada en el talón y justo debajo del hombro. Estos puntos de referencia proporcionan una protección para la etiqueta contra las rozaduras durante la producción y el envasado de tu cerveza. Con una personalidad pronunciada de comerciante del viejo mundo, su brillo y su aspecto amigable, la botella de cerveza belga sería el envase perfecto de la bebida favorita de un Hobbit, por ejemplo.

Champenoise

Como su nombre indica, esta forma está inspirada en las botellas de champán. Originalmente, esta forma de botella se utilizaba para envasar los niveles más altos de CO2 que a menudo necesitaban las primeras cervezas envasadas en botella. La botella champenoise se caracteriza por su elegante y distintivo cuello largo en forma de S. El impacto de este diseño yace en una geometría con una amplia superficie compuesta que reduce la cantidad de etiquetado disponible tanto en el panel de la etiqueta principal como en el panel del cuello, aunque a pesar de ello, proporciona múltiples opciones de etiquetados.

Para mantener la elegancia de su perfil, la botella con forma champenoise suele tener una hendidura para etiquetas más sutil que el de la botella de cerveza de cuello largo o belga. Un hombro acentuado y contemporáneo ofrece opciones especiales de decoración con vidrio gravado. El perfil de champán personifica la belleza y el equilibrio de la figura femenina. Esta elegante y voluptuosa botella brilla durante las victorias, las celebraciones y los logros de la vida.

Rechoncha y Steinie

Una botella baja  y compacta se conoce a menudo como una botella rechoncha u, originalmente, una steinie. Creada en la época de la prohibición, la steinie debe su nombre a su forma similar a una jarra (en inglés, stein) de cerveza. Este diseño bajo  y compacto proporciona un diámetro más ancho. Aunque hay un panel más grande para la etiqueta principal, la falta de cuello generalmente reduce el coste de un etiquetado adicional.

Estas botellas son disruptivas en el estante y tienen varias ventajas operativas, incluyendo su fácil manejo debido a que tienen un centro de gravedad más bajo. Su robusta estatura también ocupa menos espacio para el fabricante de la botella, la cervecería, el minorista y el usuario final. La botella está de moda por su aspecto nostálgico y su sensación de robustez en la mano del consumidor. Transmite una sensación familiar con una voz contemporánea. El perfil rechoncho y steinie personifica a un amigo fuerte y confiable con espíritu aventurero y carismático. Un joven sociable que es competente al aire libre y, a la vez, refinado en una cena de domingo con amigos o familiares.

COLORÉAME

El color comunica el posicionamiento del producto y de la marca, al tiempo que juega un papel en la protección de tu cerveza. El color de una botella de vidrio se moldea literalmente dentro del contenedor, lo que le otorga una característica natural de profundidad. El color se puede realzar con la forma, con un gravado y el grosor variable del vidrio. Y lo que es más importante, las botellas de vidrio combinan el color con la translucidez, lo que ayuda a mostrar y mejorar las propiedades visuales naturales de la cerveza. Hay tres colores básicos de vidrio disponibles.

Ámbar                                                                                       

El color más antiguo y más utilizado para las botellas de cerveza es el ámbar. La mayoría de las botellas de reserva están disponibles en este color. El ámbar es quizás el color más identificable para las botellas de cerveza. Anuncia al consumidor que la botella está llena (o debería estar llena) de cerveza.

El vidrio ámbar proporciona una excelente protección contra la radiación ultravioleta, bloqueando todas las longitudes de onda inferiores a 450 nm. Esta protección protege la calidad de tu marca al asegurar que el sabor de tu bebida permanecerá intacto, sin perturbaciones ni alteraciones.

Si bien el ámbar es el color más distintivo e histórico de las botellas de cerveza, destacar en los estantes resulta cada vez más vital en el mar de las cervezas artesanales. Aquellos que buscan un color que sea visualmente más disruptivo deben considerar el uso de botellas de vidrio blanco o verde.

Blanco 

El color blanco es otro de los colores más comunes en las botellas de cerveza. La transparencia de este color muestra el color real de tu cerveza. Destaca la estética visual de la cerveza en todo su esplendor. Debido a su lucidez, las cervezas embotelladas en vidrio de color blanco no deben requerir una protección estricta contra la luz ultravioleta. Las sidras estables a los rayos UV y las bebidas de malta de sabores a menudo se embotellan en vidrio de color blanco.

Verde 

Para tener un mayor impacto visual, puedes considerar la posibilidad de utilizar vidrio verde. Transmite un carácter histórico ligeramente nostálgico y va bien con las cervezas y las marcas con un estilo más antiguo. El vidrio verde proporciona una protección ultravioleta ligeramente mayor que el vidrio de color blanco, pero no tanto como el ámbar.

Apreciaciones sobre otros colores 

El color es un fabuloso sustrato para las etiquetas esmaltadas aplicadas (ACL, Applied Ceramic Labels), etiquetas autoadhesivas (PSL, Pressure Sensitive Labels) y etiquetas troqueladas con ventanas o formas especiales que buscan utilizar el color natural de la botella como fondo. Por muy importante que sea el color para tu marca, no sacrifiques la protección si el color del vidrio seleccionado no proporciona la protección UV que tu cerveza necesita. Después de la forma, el color es la siguiente característica a la que el ojo presta atención. El color de la botella y de la cerveza, y cómo funcionan a su vez éstas dos colores juntos, tendrá un impacto en la manera en que los consumidores ven y experimentan tu marca.

No te pierdas la segunda parte sobre cierres, decoración y customización.