La kombucha es una bebida de té frío fermentado que ha generado una corriente de seguimiento de culto por parte de los fanáticos de la salud de todo el mundo y que está dominando el mercado de los tés embotellados de Estados Unidos. Actualmente, los fabricantes de bebidas están tratando de posicionar el producto en el mercado europeo promocionando sus beneficiosas propiedades. La kombucha es una bebida antigua que se elaboró por primera vez en China, Corea, Japón y Rusia. Actúa como fuente de probióticos debido a que contiene cultivos bacterianos vivos que continúan desarrollándose tras su elaboración.
Estados Unidos puede presumir de disponer del mercado de tés RTD carbonatados más importante del mundo; en el año 2017, las ventas fueron de 405 millones de dólares, casi en su totalidad correspondientes a la kombucha. GT lidera el mercado, con unas ganancias de 275 millones de dólares anuales en ventas. O-I fabrica el envase de vidrio de la marca y el éxito de GT demuestra hasta qué punto el vidrio es el material perfecto para envasar la kombucha.
El rápido crecimiento de la kombucha demuestra las interesantes oportunidades de expansión con las que cuenta en los mercados europeos. Debido al cada vez mayor interés que existe por el bienestar en Europa, la kombucha tiene el potencial necesario para ser igualmente popular fuera de Estados Unidos.
Los millennials de Europa se ven cada vez más atraídos por los beneficios que aporta a la salud el consumir comidas y bebidas fermentadas. La kombucha, junto con el chucrut y el kimchi, supone un gran atractivo para este sector de mercado preocupado por la salud. Pese a que su único beneficio para la salud confirmado es su calidad probiótica, los fans de la kombucha sostienen que mejora los problemas digestivos, la salud cardiovascular y otros problemas inflamatorios. El uso de envases de vidrio está relacionado con la filosofía de bienestar de la kombucha. El vidrio no interactúa con sus contenidos y no afecta a su sabor. Para poder disfrutar de las verdaderas cualidades de la kombucha, resulta beneficioso envasarla en vidrio.
Dado que los jóvenes cada vez rechazan más el consumo de bebidas alcohólicas, la kombucha constituye un atractivo sustituto. Por ejemplo, en el Reino Unido un tercio de los jóvenes son abstemios. Estas personas esperan poder adquirir bebidas no alcohólicas atractivas en bares y restaurantes. La kombucha envasada en vidrio ofrece ese aspecto de alta calidad deseado por los consumidores.
La kombucha también es un producto de etiquetado limpio. Estados Unidos está a la cabeza en lo que al etiquetado limpio se refiere, con 3 por producto de kombucha, seguido de Alemania y Francia con 1,9 y 1,8 respectivamente. El hecho de que la kombucha sea una bebida “sin OGM”, “sin conservantes” y “orgánica” atrae a los fanáticos de los productos saludables. El vidrio es el envase perfecto para la kombucha, un producto no adulterado y natural. La pureza de los envases de vidrio complementa la imagen de la kombucha como un producto sin aditivos. Un producto limpio encaja mejor en envases limpios.
Debido a que el mercado de la kombucha está experimentando un crecimiento rápido, constituye una oportunidad notable para los fabricantes de ampliar su producción y sus ventas en Europa.
Actualmente el mercado europeo de la kombucha mueve aproximadamente 244 millones de dólares, pero se espera que alcance los 730 millones el año 2024. Los principales países en los que se vende kombucha en Europa son el Reino Unido, Alemania, Italia y España. No obstante, la kombucha está fuertemente arraigada en Europa Oriental, lo cual, combinado con la insuperable presencia dentro del sector de la fabricación de vidrio de O-I, promueve su expansión entre los clientes preocupados por la salud de todo el continente.